miércoles, 10 de septiembre de 2008

No voy a dar el brazo a torcer

En el momento en que todos se callaron, alze mi brazo hasta lo alto de la colina y grite mi nombre para que se pierda en el eco del silencio, mientras el miedo caia dando vueltas hasta el pie de la montaña. Pude ver como los rostros asombrados se chocaban unos con otros, algunos se sacaron los ojos sin la necesidad de utilizar las manos.
Fue una auntentica masacre, y pudo haber sido peor de no haber aparecido ese chico que se dio cuenta y señalandome dijo en voz alta: "ESTÁ BUSCANDO LA VERDAD".

0 comentarios: